Varias personas saharauis se resisten en el aeropuerto de Barajas (Madrid) a ser enviadas a Marruecos, país que hostiga al Sáhara Occidental desde hace décadas y donde no se garantizan sus derechos fundamentales

El Ejecutivo de Sánchez, a través del Ministerio de Interior, continúa incumpliendo acuerdos internacionales respecto a las personas solicitantes de asilo, por no hablar del vergonzoso trato que España lleva dando al pueblo saharaui desde hace décadas, sin reconocer su autonomía y colaborando con el Estado marroquí en el acoso hacia el mismo.

Desde hace algunos días, sabemos que varias personas han iniciado una huelga de hambre en el aeropuerto de Madrid, al conocer que serán enviadas a Marruecos sin ningún tipo de miramiento y a pesar las recomendaciones que se han realizado desde la oficina del Defensor del Pueblo cuando a estas personas se les impuso tener traductores marroquíes.

Entre las personas retenidas en el aeropuerto de Barajas hay algunas muy enfermas y menores de edad. En este sentido, los activistas ya han manifestado que temen por sus vidas si finalmente el Gobierno español cumple con su voluntad de deportarles, ya que sufrirán represalias y daños físicos y psíquicos.

Desde la CGT continuamos defendiendo el derecho que tiene cualquier pueblo a la autodeterminación, a existir y a defender su libertad. El Sáhara Occidental, que fue colonia española hasta 1975, lleva décadas luchando por la vida de su gente mientras que el reino alauita de Marruecos –con el beneplácito de la Comunidad Internacional- ocupa sus territorios y les impide desarrollar una vida tranquila y en paz. El régimen dictatorial de Mohamed VI hostiga cruelmente a miles de saharauis, por ello no debemos permitir que el Estado español, con su Gobierno “progresista” participe de esta injusticia.

 

Gabinete de Prensa del Comité Confederal de la CGT.

CGT denuncia la inhumanidad y la hipocresía del ministro Marlaska, y la complicidad del Gobierno español (PSOE) con Marruecos, al negar el asilo a varios saharauis en huelga de hambre.