El RACC, a través de su gabinete de prensa, ha anunciado que este ERE sería “social” ya que se realizaría mediante bajas incentivadas, recolocaciones, y ofertas de prejubilación. La realidad es muy diferente: su oferta de prejubilaciones a partir de los 58 años abocará a la precariedad a quien la acepte (60% del salario neto hasta los 62 años) y sólo afectará a una parte mínima, 7 u 8, de los 194 afectados. Su oferta de recolocaciones es patética: pese a tener una rotación anual que ronda el 20%, sólo son capaces de ofertar 16 vacantes, sin respetar las condiciones laborales anteriores.

En cuanto para el resto de afectados, plantea una indemnización de 22 días con un máximo de 13 meses, lo que más que una oferta es una ofensa, demostrando falsas las informaciones que ha mandado a la prensa y escondiendo una dura aplicación de la reforma laboral. Os pedimos que se contrasten las informaciones con las diferentes partes del conflicto y no se les de veracidad de antemano a las notas de prensa del RACC por el hecho de venir de una empresa supuestamente responsable.

En cuanto para el resto de afectados, plantea una indemnización de 22 días con un máximo de 13 meses, lo que más que una oferta es una ofensa, demostrando falsas las informaciones que ha mandado a la prensa y escondiendo una dura aplicación de la reforma laboral. Os pedimos que se contrasten las informaciones con las diferentes partes del conflicto y no se les de veracidad de antemano a las notas de prensa del RACC por el hecho de venir de una empresa supuestamente responsable. Somos conscientes que es difícil cuestionar la información que provienen de empresas que gastan grandes cantidades de dinero en publicidad y que forman parte de los ingresos de los medios de comunicación.

El RACC, recordamos que es una asociación sin ánimo de lucro, se aprovecha de la reforma laboral y plantea un ERE de extinción de 194 personas, el 13% de su plantilla global, que afecta a 6 de las empresas del Grupo y significará el cierre de numerosas sucursales tanto en Catalunya como en el resto de España.

Argumenta que se debe a la falta de rentabilidad y al descenso continuado de su facturación desde el año 2009. Problemas que nunca han sido reflejados en las memorias anuales sometidas a la aprobación de las asambleas de compromisarios. Todo lo contrario, año tras año ha presentado resultados positivos «que mejoraban incluso las previsiones» (memoria 2011). Ese año la retribución del personal de Alta Dirección (que no es junta directiva) se incrementó en 140.000€ (de 1.148.000€ a 1.288.000€), en concepto de retribuciones variables. Mientras la plantilla continuó con los salarios congelados como en años anteriores, al tiempo que se reducía considerablemente, pasando de 1.905 personas en 2009 a 1.520 al final del 2012.

Las bajadas de facturación es algo visible y previsible, gracias a la Alta Dirección y a la alegría con que acometió nefastas inversiones y nuevas líneas de negocio que han resultado fallidas -sirva como ejemplo RACC móvil: una inversión de 8M de euros, vendida por 1 euro a Euskaltel- que son los que han llevado a estos problemas y que pretenden ocultar con el paraguas de un ERE.

Porque el ERE no solventará los problemas de la entidad. En cambio, ahondará en el descenso de la facturación. En un entorno tan competitivo, perder el esfuerzo realizado durante años para conseguir ser una marca de referencia también fuera de Catalunya, es una temeridad. El cierre de sucursales significará indefectiblemente la pérdida de masa social y la imposibilidad de crear nuevos socios. Igualmente, recortes de plantilla en los servicios centralizados, como Atención al Socio, Emergencias, Asistencia en carretera,… que pasarán a ser cubiertos por empresas externas low cost, radicadas en cualquier parte del mundo, despersonalizadas y desmotivadas,  afectarán a la calidad de servicio que hasta ahora distinguía al RACC y que era su «sello inconfundible».

Los Comités de Empresa de las empresas afectadas y los sindicatos representativos consideramos impresentable e innecesario este ERE, presentado por una empresa, un Consejo de Administración y una Fundación que presumen de empresa vital para Cataluya, de servicio para los socios/clientes en todo el Estado y de ser parte vital de lo que ellos llaman “sociedad civil”. No estamos dispuestos a aceptar este estado de cosas como el “resultado lógico de la crisis” mientras se mantienen el aventurerismo en las inversiones y el dispendio (como en el Circuit de Cataluña) con el único objetivo de dar una falsa imagen.

La representación legal de los trabajadores, mediante informes exhaustivos, ha propuesto otras alternativas viables que garantizan la continuidad del  RACC y harían innecesarios los despidos. Son informes serios, rigurosos, realizados por los auténticos conocedores del día a día del grupo. Ante las negativas a aceptar nuestras propuestas, los trabajadores hemos iniciado acciones de protesta, convocando una huelga de 24 horas para el próximo lunes día 11.

La CGT llama a la ciudadanía a que se solidarice con los trabajadores y, en especial, a los socios y clientes del RACC a que rechacen el despido de los que, todos los días, se esfuerzan por darles un buen servicio.

 

 


Fuente: Prensa CGT Barcelona

Barcelona. Huelga el lunes 11 de febrero en el RACC y concentraciones de 9 a 11 y de 17 a 19 h. en la sede del RACC en Diagonal 687