Ya son 11 mujeres asesinadas este 2025, elevando la cifra total a 2.037 asesinatos machistas documentados en España desde 2003. Desde que publicamos este artículo mensual, no ha habido un solo mes en el que no hayamos tenido que denunciar el asesinato de una mujer. Este mes tampoco es la excepción:
- Mujer de edad desconocida, ciudadana alemana. San Roque (Cádiz, Andalucía). 9 de enero. (Inicialmente no se consideró feminicidio hasta la detención del agresor el 29 de enero).
- María Dolores Otero González, 79 años, Las Cabezas de San Juan (Sevilla, Andalucía). 27 de enero.
- Karilenia, 40 años, Langreo (Asturias, Asturias). 31 de enero.
- Mirentxu Arregui Blasco, 76 años, Irún (Guipúzcoa, Euskadi). 5 de febrero.
- Joyco Lima, 28 años, Brenes (Sevilla, Andalucía). 5 de febrero.
- Catalina (Lina) Guillén Balbuena, 49 años, Benalmádena (Málaga, Andalucía). 9 de febrero.
- Consuelo Padrón Medina, 86 años, La Aldea de San Nicolás (Las Palmas, Canarias). 19 de febrero.
Estos asesinatos no solo evidencian el fallo de las instituciones, sino también el impacto en las familias. Catalina dejó huérfanos a sus cuatro hijos, quienes se suman a los 1.862 huérfanos que han perdido a sus madres desde 2003 por la violencia machista, más de la mitad menores de edad (969), tal y como publica la Fundación Mujeres en el Observatorio de la Violencia de Género recientemente.
La nueva Ley Orgánica de medidas en materia de eficiencia del Servicio Público de Justicia, aprobada en enero, ampliará por fin las competencias de los juzgados de violencia sobre la mujer para incluir delitos como violencia sexual, mutilación genital femenina, matrimonio forzado y acoso con connotación sexual contra mujeres. Sin embargo, el personal judicial ya ha alertado del previsible colapso ante la falta de recursos, mientras el Ministerio de Justicia se limita a redistribuir jueces en lugar de crear los nuevos tribunales supuestamente necesarios. Esta solución, claramente insuficiente ante un previsible aumento del 20% en la carga de trabajo, afectará a la calidad del servicio y, en última instancia, a la protección de las víctimas. Una vez más, el sistema capitalista y patriarcal lanza leyes con grandes promesas pero sin garantizar medios reales para la clase trabajadora y, menos aún, para las mujeres. Dejando fuera a todas aquellas personas de los colectivos LGTBIQA+, que también son objeto de la misma violencia machista.
El seguimiento actual a las víctimas, poniendo el foco sobre ellas; se ha demostrado en los últimos años que es un sistema que tampoco nos protege adecuadamente.
Es urgente seguir visibilizando esta violencia y exigir cambios efectivos. No podemos permitir que otro año transcurra con la misma violencia estructural e interseccional.
Desde la CGT exigimos:
- Medidas efectivas de protección contra todas las formas de violencia machista, incluyendo la física, psicológica, sexual, económica, simbólica, institucional, digital y vicaria. Es imprescindible garantizar mecanismos de prevención, protección y atención integral que sean accesibles y eficaces.
- Recursos y apoyo especializado para madres, hijas, hijos y otras personas en situación de violencia, asegurando su seguridad, bienestar y acceso a derechos fundamentales.
- Refuerzo de los protocolos de actuación en casos de violencia de género, violencia vicaria y cualquier tipo de violencia interseccional, acompañado de programas de formación y sensibilización dirigidos a todos los niveles de la sociedad.
- Asignación de recursos financieros adecuados para garantizar la implementación de estas medidas y su impacto efectivo.
- Aplicación real de las leyes existentes, como la Ley Orgánica 1/2004, de Protección Integral contra la Violencia de Género; la Ley Orgánica 8/2021, de Protección Integral a la Infancia y la Adolescencia frente a la Violencia; la Ley Orgánica 10/2022, de Garantía Integral de la Libertad Sexual; la Ley 4/2023, para la Igualdad Real y Efectiva de las Personas Trans y para la Garantía de los Derechos LGTBI; y las disposiciones
Es fundamental desarrollar nuevas medidas de protección para construir un sistema integral que erradique todas las formas de violencia machista, no solo en el ámbito doméstico, sino también en las calles, lugares de trabajo y centros educativos.
¡La lucha contra la violencia machista es urgente, imprescindible y colectiva!
Secretaría de la Mujer – CGT
