A tres días de la presentación del ERTE en OPEL, con una situación respecto a la pandemia crítica, agobiados por la situación sanitaria, y los contagiados y fallecidos multiplicándose, la incertidumbre y preocupación son generalizadas.

Como la mayoría de vosotros sabréis, CGT no firmó el ERTE, principalmente por la forma de actuar del grupo PSA. Ellos decidieron parar la producción desde el 17 marzo, por falta de suministro y nos llaman una semana después para negociar la forma de “regular” los días sin actividad. Proponen cubrir desde el 17 al 29 con vacaciones/paros técnicos, algunos de ellos con carácter retroactivo y, a partir del día 30 de marzo, ERTE por causas de fuerza mayor.

CGT entiende que lo socialmente responsable habría sido que el grupo se hiciera cargo de los salarios y cotizaciones hasta que se acogiera al ERTE, o hasta el día que fuimos convocados, con una pequeña parte de sus beneficios como han hecho otras empresas o grupos en esta situación excepcional. CGT desde el principio de esta crisis manifestó su disposición a valorar todo tipo de medidas, incluso el ERTE, pero su actitud nos ha hecho imposible valorar la posibilidad de un acuerdo.

Ellos pensaban y piensan que con las medidas adoptadas se podía trabajar sin riesgo. Según noticias oficiosas (oficialmente no han dicho nada) ya planean nuestra vuelta al trabajo con fecha próxima. O la pandemia evoluciona milagrosamente o las medidas que van aplicar cambian mucho el sistema de trabajo para garantizar las recomendaciones sanitarias y la Ley de Prevención Riesgos laborales. La situación que había cuando paramos no garantizaba la protección contra el contagio por lo que no se debería reactivar la actividad sin el conocimiento previo de la Representación de los Trabajadores y los Delegados de Prevención de todas las medidas adoptadas.

Desde CGT vigilaremos y defenderemos que se cumplan todas las medidas para proteger la salud de los trabajadores cuando decidan la vuelta al trabajo.


Fuente: CFT - Aragon y La Rioja

ERTE en Opel