La organización anarcosindicalista recuerda al Gobierno progresista de Sánchez e Iglesias que la deuda con las víctimas del franquismo y la transición no se salda únicamente sacando los huesos del dictador de Cuelgamuros.
La Confederación General del Trabajo (CGT) muestra su rechazo a la respuesta que el ministro de Interior, el socialista Fernando Grande-Marlaska, ha dado a una plataforma vecinal del madrileño barrio de Carabanchel que pretende recuperar la memoria de la antigua cárcel convertida en CIE en la actualidad.
La plataforma vecinal se había dirigido por carta al Ministerio del Interior el pasado 22 de mayo, proponiéndole la construcción de un centro de memoria en los terrenos de la antigua cárcel, levantada por presos del franquismo. Según esta plataforma vecinal, tanto el terreno como el edificio son propiedad de Interior y aseguran desde la misma que el proyecto presentado al ministro socialista es perfectamente compatible con la normativa urbanística actual vigente en los terrenos, por lo que su viabilidad depende del Gobierno del Estado español.
Este 12 de junio, la Plataforma Ciudadana por el Centro de Memoria de Carabanchel (PCCMC) ha recibido contestación por parte del Ministerio del Interior, que le ha denegado su petición alegando que “actualmente se encuentra en curso la tramitación de la promoción de la ejecución del planeamiento urbanístico de estos terrenos”. Según información compartida por El Salto, esta respuesta es incompatible con el discurso del propio Gobierno del Estado español y con la ley de Memoria Histórica del PSOE, que habla de “la protección de lugares en los que se hayan desarrollado hechos de singular relevancia por su significación histórica, simbólica o por su repercusión en la memoria colectiva, vinculados con la lucha del pueblo español por sus derechos y libertades democráticas, así como la represión y violencia”.
Desde CGT han mostrado su apoyo a la plataforma vecinal de Carabanchel, que seguirá luchando por recuperar la memoria de miles de personas asesinadas y torturadas en esta cárcel, una de las muchísimas en todo el Estado, y recuerda que queda mucho por hacer para honrar a las víctimas del franquismo y la “modélica” transición y hacer justicia contra sus torturadores y verdugos. CGT lleva apoyando la lucha de la Plataforma para ubicar un Centro de la Memoria en los terrenos que ubicaron este centro de represión durante decenas de años y que fue construido por los presos del franquismo. Las vicisitudes políticas que ha sufrido Madrid en las últimas elecciones han coartado las negociaciones emprendidas con el Ayuntamiento de Madrid. Ahora, desde el Gobierno “progresista” se vuelve a ningunear y atacar la memoria de las víctimas del franquismo.
CGT también señala el hecho curioso de que este edificio haya sido un CIE, un centro de internamiento de personas migrantes que han pasado meses, incluso años, privadas de libertad y cuyo único delito es haber nacido pobres y haber intentado buscarse la vida lejos de la miseria de sus países de origen. En este sentido, la organización anarcosindicalista señala que no es de extrañar que el ministro de Interior, que mantiene concertinas y aplica políticas migratorias durísimas contra seres humanos en la Frontera Sur, tenga estas actitudes ante el propio sufrimiento de miles de personas que dieron su vida en defensa de la liberta y contra el fascismo, el mismo que hoy se ha instalado en las instituciones “democráticas” y comparte espacios con partidos con miles de militantes desaparecidos.
