El compromiso adquirido por el Tratado de Kyoto finaliza en 2013 y lo acordado deja todo en el aire, ya que, EEUU, con el apoyo de otras grandes potencias, ha conseguido un acuerdo con escaso valor vinculante y que incluye una clausula por medio de la cual aunque se firmase un nuevo tratado éste no entraría en vigor hasta 2020, aplazando hasta la próxima cumbre una decisión vinculante para que los países ricos reduzcan las emisiones.
Durban se convierte en un fracaso respecto a las negociaciones ya que a partir de 2013, finalización del Tratado de Kyoto, la emisión de gases de efecto invernadero no va a disminuir. Aplazar hasta 2020 un acuerdo jurídicamente vinculante, puede conllevar a una subida de la temperatura global de hasta 4ºC, cuando lo recomendado por la comunidad científica para evitar situaciones catastróficas en el planeta es un incremento por debajo de los 2ºC, según los propios informes y estudios publicados por el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) auspiciado en el seno de Naciones Unidas.
Tampoco se han logrado avances significativos para conseguir los recursos económicos que lleven a cabo el desarrollo del “Fondo Verde”, el cual es una pieza clave para solventar los problemas que el cambio climático está provocando en las economías de los países en vías de desarrollo.
Para la CGT, las consecuencias para la población mundial van a ser muy graves e irreversibles. No podemos permitir que el futuro del planeta quede en manos de los intereses económicos del capitalismo, de las multinacionales, de los gobiernos de EEUU y las grandes potencias.
Secretaría de Acción Social de la CGT
Madrid, 13 de diciembre de 2011
Fuente: Sª Acción Social de la CGT