“Las personas que trabajan pierden derechos y salarios mientras sigue aumentando el coste laboral por el incremento espectacular de los despidos”
Para la CGT, la Encuesta Trimestral de Coste Laboral (ETCL) correspondiente al primer trimestre de 2009, que publica el INE, muestra algunas variables que debieran hacer sonrojar a quienes tienen la responsabilidad de la gestión pública (gobierno, parlamento, comunidades autonómicas y ayuntamientos) y a la vez, variables que denuncian esa “violencia privada institucional” que el empresariado español, viene ejerciendo desde el 2008, desde la más absoluta impunidad, contra millones de personas asalariadas.
Las personas trabajadoras asistimos al hundimiento de las rentas salariales y las pérdidas de nuestro poder adquisitivo y encima tenemos que soportar los discursos de quienes confunden interesadamente sus situaciones de privilegio : empresarios y ejecutivos con salarios medios anuales de 1 Millón de euros, gobiernos e instituciones con salarios blindados, con una sociedad que repunta con “brotes verdes”, como si la feria, para la mayoría social, no fuera un mundo destrozado laboral y socialmente.
El modelo productivo español, no sólo se ha mostrado especulativo, explotador e insostenible medioambientalmente, sino que, además, en sus recetas de “regeneración”, se muestra con la cara más autocrática, autoritaria y violenta, consustancial a esa cultura empresarial, sustentada en una estructura social de “ordeno y mando”.
Parece que sólo tendremos nuevo “modelo” produciendo parados y paradas, es decir, ejercitando una violencia sobre las personas trabajadoras con absoluta falta de control y límites democráticos, pues no otra cosa supone los cientos de miles de despedidos con contratos “temporales” de obra o servicio determinado (van destruidos 2,3 millones de empleos silenciosos, inexistentes, como son los contratos temporales), como el espectacular aumento de los EREs y Concursos de Empresas, que ya en el primer trimestre de 2009 han destruido más empleo que en todo el año 2008.
El coste laboral total (salarios, cotizaciones sociales, y otros) por trabajador, se incrementó en un 3,9%, mientras que el coste salarial (salario base, complementos salariales y pagos por horas extras), creció un 2,8%. Es en los otros costes, como las indemnizaciones por despido, donde el aumento supuso un 6,8%. Es decir, al empresariado le es muy rentable destruir puestos de trabajo como, por ejemplo, en la construcción, típica actividad insostenible, donde cerca del 40% tenía contratos por “obra o servicio” y en un año ha destruido 700.000 empleos. Aquí es donde ha crecido de forma espectacular los otros costes por despidos, al igual que en la industria, donde los costes por despido se transfieren al erario público a través de las suspensiones temporales de empleo.
La otra consecuencia, perversa y antisocial de este modelo productivo que sólo produce parados y paradas y contratos precarios, es el “aumento medio de los salarios” los cuales pasan a situarse en 1.767,34 €. La explicación es muy fácil, el cálculo de la media se hace sobre las personas que trabajan y como quienes están siendo despedidos son los contratados en trabajos de poca cualificación y baratos (contrato de obra y servicio en la construcción, hostelería, comercio…) cada vez tienen más peso para el cómputo de la media los trabajos con salarios de alta cualificación y contratos fijos.
Para CGT, somos los trabajadores y trabajadoras quienes debemos forzar un cambio de rumbo real y la HUELGA GENERAL es la herramienta necesaria.
Fuente: Secretariado Permanente de la CGT