La organización anarcosindicalista explica que existen otros lugares y salas que pueden acoger la exposición del médico socialista sin necesidad de desmontar uno de los pocos museos y archivos históricos que quedan de estas características.
La Confederación General del Trabajo (CGT) ha tenido conocimiento de la situación que en estos días se está dando en el histórico museo de Sanidad e Higiene Pública de Madrid, consistente en un desmantelamiento, casi en secreto, de un fondo material único, muy importante para la historia de la medicina, y cuya pérdida y/o destrucción sería irreparable.
Con sede en el Instituto de Salud Carlos III de Madrid, en la Avenida Monforte de Lemos del barrio de La Paz-Fuencarral-El Pardo, este museo ocupa las antiguas dependencias del laboratorio de microbiología del Hospital del Rey. Este complejo estaba constituido por dos hospitales grandes: el Victoria Eugenia y el Hospital del Rey, aunque también había otro más pequeño y moderno llamado Infante Felipe. Estos tres edificios fueron el origen del actual Carlos III que depende a su vez del Hospital de La Paz. En el lugar que hoy es este museo, que se mantiene como cuando era utilizado, se ubica un importantísimo fondo mobiliario, instrumental y bibliográfico de los antiguos hospitales para enfermos infecciosos. De hecho, en los años 80 del siglo XX, este laboratorio estaba a pleno rendimiento con la crisis del SIDA. Además, muchos objetos fueron donados o cedidos en su día para este espacio.
Según la CGT, el Gobierno de PSOE-Unidas Podemos, a través del Ministerio de Sanidad, que lleva meses promocionando el aniversario de la muerte de Juan Negrín –médico, político socialista y presidente del Gobierno de la II República española- de la que ahora en noviembre se cumplen 83 años, está promoviendo el traslado de muchos objetos de este antiguo laboratorio que son verdaderas joyas del patrimonio cultural, científico y bibliográfico de la ciudadanía madrileña. Hay libros únicos, además de objetos como máquinas de rayos X y microscopios, utensilios médicos, etc. que requieren una manipulación muy minuciosa a la hora de trasladarlos, guardarlos en cajas o bien dejarlos arrinconados en lugares determinados en otros edificios.
CGT considera que el Estado dispone de muchos otros edificios, habilitados para acoger exposiciones del estilo de la de Juan Negrín, que podrían utilizarse sin necesidad de mover objetos tan valiosos y evitar que pudieran dañarse o perderse para siempre. Por otro lado, CGT manifiesta que es inadmisible que este desmantelamiento se esté llevando a cabo sin publicidad de ningún tipo, incluso a espaldas de las propias personas trabajadoras del museo, que llevan años cuidando del mismo y que en estos momentos están viendo cómo gran parte de este material puede verse afectado por la decisión del Gobierno de celebrar una exposición en un sitio que precisamente es un museo dado el material tan importante que tiene. De momento, según ha podido conocer CGT, archivos históricos y material bibliográfico se está logrando reubicar en la Biblioteca Nacional de Ciencias de la Salud, que depende de la dirección del Instituto de Salud Carlos III. Hace más de 10 años que la dirección del ISCIII pasó la responsabilidad a esta biblioteca del museo de Sanidad e Higiene Pública, sin embargo el personal a cargo de este museo ha hecho todo lo que ha estado en sus manos para proteger y cuidar, gestionando las visitas públicas al mismo, todo lo que en él se ha depositado durante estos años. Esta biblioteca contiene libros incunables, archivos del Hospital del Rey, el registro de la despensa del Hospital Victoria Eugenia, libros de medicina y cirugía del siglo XIX, etc.
Desde CGT exigen al Gobierno de PSOE-Unidas Podemos que recapacite sobre esta decisión, y estudie la puesta en marcha de la exposición del médico Juan Negrín en cualquier otra sala o edificio de la Comunidad de Madrid, evitando dañar el fondo conservado hasta el momento en el museo de Sanidad e Higiene Pública de Madrid.
