El 28 y 29 de Octubre se realizó el curso de formación confederal “El camino hacia la autogestión”, en el que a través de la visión histórica de las colectividades anarquistas y otras experiencias históricas y actuales se analizaron los elementos imprescindibles que configuran la autogestión.

Para la aproximación histórica contamos con el historiador francés Frank Mintz, experto en el conocimiento de estas realidades, y con Rafael Cid a cargo de la exposición de otras experiencias autogestionarias actuales.

A modo de síntesis, se puede constatar que en la historia del movimiento obrero la autogestión, con sus diversas denominaciones históricas –comuna, comunismo libertario, colectividad, gestión directa-, ha estado presente como una constante y una idea-fuerza capaz de organizar formas de resistencia en sistemas totalitarios, y de hacer viable social y económicamente las experiencias de revolución social desarrolladas en distintos países y momentos históricos.

Experiencias colectivistas históricas como la de los Soviets ucranianos de 1905 que consiguieron la toma de decisiones por el pueblo en su conjunto sin tutelajes políticos ; el Magonismo y Zapatismo mejicano de 1910/17 ; el movimiento de ocupación de fábricas de Milán en 1920 ; la colectividad de Kronstadt que asambleariamente en 1921 llegaron a oponerse al poder soviético denunciando su verticalidad y desafiándoles con libertad de prensa, de reunión y rechazando los presos políticos, y que fue arrasado por el poder ruso ; el Espartakismo alemán bajo la conocida idea de Espartaco de liberar esclavos.

Los consejos obreros de 1956 en Hungría y de 1968 de Checoslovaquia ; el importante mayo francés de 1968 ; la fábrica de relojes Lip de 1972 en Francia o la SALTV que se encargó del transporte en Valencia entre 1964 y 1979 ; la autogestión desarrollada por los Zapatistas en la actualidad en México ; las fabricas ocupadas en la Argentina de hoy ; y por supuesto todas las colectividades de la España de 1930 de la CNT y la UGT, y hasta del Partido Comunista, que fueron un ejemplo de creatividad y autogestión en intensidad y precocidad desconocido en ninguna otra parte del mundo.

La autogestión ha sido y es una de las grandes expresiones de la utopía libertaria que ha permitido llevar a la práctica el deseo de progreso real en condiciones dignas y humanas. Algunas de sus claves más relevantes son :

- Organización y capacidad de la base que parte de una necesidad.

- Horizontalidad –sin jerarquías y solo desigual en competencias que no dan lugar a privilegios-.

- Decisión asamblearia –buscando la desintegración del concepto de dominación a través de la democracia directa, inclusiva y de proximidad sobre la realidad cercana que cada uno entiende-.

- Autónoma –sin controles, tutelajes ni injerencias externas-.

- Solidaridad efectiva-apoyo mutuo –colaboración en la que unas partes no son indiferentes de las otras, en contraste de la competitividad que tanto promueve el capitalismo-.

- Responsabilidad –buscando aportar lo máximo y lo mejor desde la competencia personal o grupal.

- Carácter extensivo –superando el ámbito de organización de lo económico del que inicialmente surge para pasar al ámbito de lo social y político ; es una potente escuela de transformación social a través de la “propaganda por el hecho”, que conlleva trabajo físico sin quedarse en el discurso.

- Necesidad de un imperativo ético de cada uno se sus componentes, capaz de reconocer y querer desarrollar los valores que hay detrás de la autogestión ; una forma de vida diferente. Se habla del “obrero consciente” capaz de suscribirse a revistas que les leían compañeros porque ellos eran analfabetos, desde la sed de lectura y de saber

Avanzar en la autogestión ha sido siempre un ir más allá de las etiquetas para entrar en el campo de las realidades, ya que son los comportamientos y actitudes individuales y grupales del propio colectivo o del contexto los que, aun contradiciendo sus propios principios ideológicos, rompen la autogestión. Muchas experiencias autogestionarias se han estancado también por partir de ideas incuestionables como el estatus patriarcal, la confianza en una autoridad “externa” o la anulación del individuo aplastado por la colectividad. De ahí la importancia de romper prejuicios y triunfalismos para ver críticamente y aprender de la historia del movimiento obrero.

Hoy la autogestión en nuestro entorno existe en experiencias como la de Marinaleda, el Periódico Diagonal, Radio clara 104.4, B.A.H., escuela Paideia, La Prospe y otras tantas iniciativas similares, pero por dimensión y extensión social no dejan de ser meros ejemplos, que aun valorables, nada tienen que ver con las lecciones de autogestión de otros tiempos. Las bases, sin embargo, de este régimen económico actual se van resquebrajando y nuestra respuesta tiene que ser la capacidad de respuesta de reorganización desde la autogestión.


Fuente: Área Confederal de Formación. Foto : Esther Tello.

Celebrado en Madrid el curso “El camino hacia la autogestión”